Por Jorge Zambrano
¿Alguna vez, alguien de ustedes se ha visto envuelto en una plática acerca de este tipo de anillos? Estamos hablando de algo REALMENTE regio…
Tiempos como este se veían tan, pero tan lejanos… cuando nuestras platicas giraban en torno a las chavas, las fiestas, las pedas, los conciertos, los carros, las motos y el fútbol… pero esos tiempos lejanos se han ido acercando sin que nos diéramos cuenta y ahora estamos inmersos en ellos. Las cosas cambiaron de eso a: el trabajo, la política, los negocios, las casas, las cuentas de banco, las bodas, etc… Típicamente para llegar a una boda hay que comprometerse, pero aquí en el norte, antes de eso inventamos otro escalón que es el famoso anillo de promesa.
Aquí, se habla principalmente de 2 tipos de anillos: este son, el de promesa y el de compromiso. Yo no soy un experto en el tema, de hecho ni me interesa, pero la vida tiene sus maneras de introducirte.
Una vez estaba platicando con una compañera de la escuela y cuando se rozó el tema de su estatus, levantó su mano izquierda hacia mí para mostrarme un brillante anillo, (un poco sonrojado) “ah okay, estas comprometida entonces…” Antes de eso, si sabía de, mas no me ponía yo a mirar las manos de las chavas para ver si llevan anillos o no, pero a partir de esa experiencia, me di cuenta que ya es tiempo, no esta por demás echar un vistazo rápido.
El Anillo de Promesa:
Hasta el momento yo solo se que se utiliza en el norte, la gente del centro y sur del país con la que he hablado ni saben que existe. Físicamente no se que diferencia tiene contra un anillo de compromiso, mas que el de promesa es de menor calidad y tiene una piedra mas pequeña, pero a simple vista no distingo uno del otro. Se usa en el mismo dedo que el de compromiso (vease ilustración de arriba). Es una especie de “pre-anillo” de compromiso.Así que si vas por orden en el esquema regio, vendría siendo algo así:
Conocer —> Andar quedando —> Noviazgo —> Anillo de promesa —> Anillo de compromiso —> Matrimonio —> Relaciones Sexuales (jaja!)
Para mi manera de verlo, ese esquema podría ser más sencillo… el anillo de promesa viene sobrando y las relaciones se pueden ir intercalando por ahí… ¡Es que realmente a este anillo no le encuentro razón de ser! bueno mentira… si la hay más no va de acuerdo a mi modo de pensar. Quienes están a favor de esa tradición argumentan que es una manera de darle todavía más formalidad a una relación. Que es una manera de mostrar la intención que uno tiene de casarse con la novia, más… no exactamente en este momento. Más bien, es una promesa de que se va a comprometer en un futuro a casarse con ella en algún punto de sus vidas. No veo cual es la novedad ahí, idealmente se supone que para eso son las relaciones. No me refiero que son para casarse, personalmente no veo el matrimonio como el único camino. Me refiero a compartir tu vida con alguien a quien quieres a través del medio que más se adecue a las necesidades de ambos. Para fines de este artículo consideremos que si estamos hablando de matrimonio.
Ese tipo de promesas para mi son absurdas, ¿para que tanto rodeo?, ¿para que prometer que vas a prometer algo?, mejor cuando realmente estés seguro de que te quieres comprometer bien ¡hazlo! y no te andes con promesas de segundo orden.
Lo peor de todo, es que aquí (generalizando) las chavas al recibirlo se emocionan y le llaman a todas su amigas del grupo del martecitos para contarles que ya les dieron anillo de promesa. Eso es EL chisme del mes, todas las amigas se alborotan y lo quieren ver y la que lo recibió lo porta con orgullo. Mientras que por el otro lado a mi me da tristeza cada vez que me entero de eso. Lo veo como una manera de “marcar”, de separar a una mujer de una manera tan vil como marcar con un fierro al ganado ¡¿Y que ellas les emocione eso?!
Otra razón por lo que lo dan algunos, es para “apaciguar” a las que tienen la intensa psicosis por casarse (por lo general esas del grupo del martecitos que se emocionaron). Algunas es porque ya todas sus amigas se están casando, otras porque ya son unas “señoronas quedadas de 26 años”, otras porque las presionan en su casa, en fin, hay muchísimos motivos. Esta psicosis de casarse llega a tal grado, que he escuchado casos en los cuales mujeres tienen iglesia separada para x fecha, cuando aún ni si quiera tienen novio. La reservación es solo “por si la llegan a ocupar en ese entonces”. A mi sinceramente me desconcertaría mucho que mi novia me hiciera el «pequeño comentario» de que tiene iglesia separada para dentro de x tiempo. Mal si es desde que nos conocemos, creo que lo pudimos haber platicado los dos ¡pero todavía peor si la tenía desde antes de que nos conocieramos! Ir pensando que se acerca la fecha y sentirse presionado a “cuadrar” las cosas con esa fecha que viene para ver si si la tomamos o si la dejamos pasar, no gracias, prefiero que las cosas se den naturalmente de adentro hacia fuera y no al revés. Entonces en los casos donde hay mucha presión de parte de la mujer por casarse, el hombre le suelta un anillo de promesa ya para aliviarse de esa presión al menos por un rato.
Otro caso típico en que la gente da anillo de promesa es cuando por alguna razón se van a separar geográficamente. El caso típico es que alguno de los dos se va a ir a estudiar maestría al extranjero. Aquí entran en juego varias limitantes que hay quienes las tienen y quienes no, pero quienes dan anillos de promesa en la mayoría de los casos si las tienen. El asunto está en que “no pueden” irse a vivir juntos al extranjero nomás así porque aún no están casados y eso sería pecado y la gente que comete pecados se muere y se va al infierno. Y tampoco se pueden casar en ese momento porque no tienen los medios. Ahí dan un anillo de promesa para amarrar e irse con más tranquilidad a estudiar fuera.
Básicamente esas son las razones, todas van hacia “comprometerse” aun más en la relación. Yo no entiendo como un anillo de promesa va a lograr eso, ni que fuera un anillo mágico. El compromiso esta en esas personas, no en el anillo y el usarlo o no, no va a impedir que esa relación se desmorone si las cosas no están como debieran estar. No veo la necesidad de «materializar» una promesa de esa manera. Es más, el darse anillos de promesa pienso yo que incluso en algunos casos puede llegar a empeorar la relación (como también en el caso de separar la iglesia con anticipación). Mete una enorme presión en un momento en el cual tal vez la relación no es lo suficiente sólida para soportarla. Probablemente están a gusto juntos, pero a la relación aún le falta “madurar” y el ya irse encaminando de esta manera siento yo que puede dejar a la chava que lo recibió con un sentimiento de “acorralada”. ¿Les parece razonable si digo (otra vez generalizando) que un caso tipico es: El chavo unos cuantos años mayor que la chava, el ya tiene trabajo estable, ya viajó, tal vez hasta ya hasta hizo una maestría, ya hizo sus cosas que tenía que hacer, y la novia apenas está terminando su carrera y ya le andan soltando el anillo?
Como podrán deducir, yo jamás me plantearía la posibilidad de dar un anillo de promesa, pero cada quien es libre de hacer lo que se le da la gana mientras no afecte a los demás… Cada persona es un mundo.
Si gustan aprender sobre anillos de compromiso hagan click aquí
Comentarios recientes